Es evidente y está más que demostrado que la mejor forma de facilitar los aprendizajes de cualquier habilidad, ya sean habilidades comunicativas, sociales o académicas, es a través de la motivación.
Cualquier niño o niña sin ningún tipo de diagnóstico aprenderá mejor y de forma més efectiva si conseguimos motivarla durante este proceso de aprendizaje, pero esto todavía es más evidente en las personas con autismo.
Las personas con autismo suelen presentar un rango de intereses muy potentes y limitados por ciertos temas, los conocidos como intereses restringidos, y la forma más efectiva de fomentar y facilitar los aprendizajes es utilizando estos temas de interés tan potentes.
¿Cómo fomentar la motivación en el aprendizaje de las personas con autismo?
A menudo no es fácil motivar a una persona con autismo a aprender cosas por las cuales no está motivada, y esto, cualquier profesor que haya tenido alumnos con autismo en clase podrá afirmarlo.
Por lo tanto, una buena estrategia para motivarles es utilizar sus áreas de interés, introducir el aprendizaje dentro de la temática de interés.
Por ejemplo, si tenemos a un niño con autismo que le gustan los dinosaurios, podemos enseñarle a sumar y restar utilizando dinosaurios, si tenemos a una niña con autismo que le gusta mucho la serie de dibujos Peppa Pig, podemos enseñarle habilidades sociales a través de historias creadas con personajes de la serie de dibujos Peppa Pig.
